PR02261011_VICENT Cómo ve el periodismo Manuel Vicent

Manuel Vicent asistió el pasado día 22 de octubre a unas jornadas de periodismo en la Universidad Miguel Hernández de Elche. Empezó el acto hablando sobre los inicios del periodismo, desde el puerto de Alejandría hasta las gacetas de la Plaza de San Marcos en Venecia. Después cambió de tercio rotundamente y quiso opinar sobre cómo convergen términos muy confundidos hoy en día, véase información, comunicación…para concluir que la información es pura mercancía que devoramos para después desecharla. Para esto pone como ejemplo lo ocurrido en Japón con el tsunami y en Libia con la guerra, que parecía que sólo ocurría algo en esos lugares cuando estaba grabándolos una cámara.

Habló también de la rapidez con la que llegan las noticias, ya que, una información que lees en el quiosco, puede que ya esté desfasada y te hayas enterado por medio de algún medio digital, en contraposición a otras épocas, y pone como ejemplo que Pío V tardó dos meses en enterarse de la conclusión de la batalla de Lepanto y que cuando este episodio llegó a oídos de Felipe II, los Turcos ya se habían rearmado.

Por último habla de las nuevas tecnologías como los ordenadores y los móviles, explicando el complejo de inferioridad que tiene cualquier ser humano hacia su ordenador. Sobre estos aparatos también versaba que hay que llevar cosas que no las detecten los escáneres de los aeropuertos, y eso sólo se lleva en la mente o en el corazón.

Después continuó con su ponencia hasta concluir con unas preguntas realizadas por los asistentes, la mayoría de ellos estudiantes de periodismo, que se prolongaron más tiempo del que al principio venía previsto en el guión

David Soriano

PR02261011_VICENT Manuel Vicent: "La bestia"

En este artículo titulado “La Bestia”, Manuel analiza las dos partes de Méjico, en sus propias palabras: “el culto, rico y sensible, y el brutal, violento y encanallado.” Escribe sobre una fiesta literaria a la que asistió, en la que muchos de los participantes lo único que buscan es reconocimiento y “pavonearse” delante de otras personas del gremio, mientras a escasos kilómetros de distancia hay gente que se juega la vida todos los días en busca de un futuro mejor para ellos y sobre todo para sus hijos, cruzando la frontera a Estados Unidos y arriesgándose a caer en manos de criminales.

Pues bien, este fenómeno sobre el que opina Vicent, me parece que está bastante arraigado en muchos ámbitos de la sociedad, el “mirar para otro lado”, que diríamos la gente de a pie, el no ayudar cuando se necesita es algo que me saca de mis casillas.

En China, por ejemplo, el gobierno no se ocupa de sus ciudadanos, así que sus ciudadanos tampoco lo hacen entre ellos, y ya es bastante habitual el ver imágenes en las que una persona ha tenido un accidente y los propios habitantes Chinos no se paran a socorrer, ni si quiera a preguntar qué tal está.

Pero voy más lejos, se me hace difícil comprender cómo en pleno siglo XXI puede haber tanta pobreza (África) y tanta riqueza (Europa) a escasos kilómetros. Parece que sí, que todos sentimos mucho lo que pasa allí y nos da mucha pena, pero, a la hora de la verdad, preferimos seguir conduciendo nuestro coche, pasar unas vacaciones idílicas e ir a restaurantes de 50 euros el cubierto. Total, ya ayudarán otros, yo aquí estoy muy agustito.

David Soriano

PR02261011_VICENT Biografía del escritor y periodista Manuel Vicent

En un pueblo de la provincia de Castellón nacía hace 75 años Manuel Vicent. Villavieja vio crecer a un genio como escritor y periodista. Sus columnas en “El País” se caracterizan por estar escritas en una prosa poética inigualable. Pero antes de esto, y después de cursar estudios de derecho y filosofía en Valencia y periodismo en Madrid, escribió para las revistas “Hermano Lobo” y “Triunfo”.

Después de pasar por el diario “Madrid” llega a  "El País", donde se da a conocer y se hace muy conocido en la sociedad, tanto es así que fue galardonado con varios premios periodísticos por diversos artículos y pudo publicar numerosos libros

Era un asiduo del Café Gijón en Madrid, en el que compartía grandes tertulias literarias con otros intelectuales de la época

Manuel Vicent decía esto sobre el periodista: “Periodista es ese tipo que escribe a toda velocidad de cosas que generalmente ignora y lo hace de noche y la mayoría de las veces cansado o borracho y que no teniendo talento para ser escritor ni coraje para ser policía se queda sólo en un chismoso o en un simple confidente.”Las horas paganas. Periodistas, 293 Madrid: Alfaguara, 1998. 

David Soriano